sábado

Tomando de tu esencia y sobreviviendo con tu amor, aún así me derrumbe con un te quiero dulce y suave, sigo en pie. Gracias a tu sonrisa. Nos encontramos en el momento justo, creando de cada experiencia, un ensayo de lo que seríamos realmente. Tu voz, sonaba más dulce con un Te quiero, quizás nunca le dí tanto valor, como el día que te encontré, ahí,(nunca lo dije, mi corazón se aceleró, como el de un colibrí a punto de morir). dios, hubiese querido que nunca acabara ese día.
Abrazados, estábamos bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario